Ciclotimia.

Hoy me siento sensible.

Si alguien llegase a entrar un día a mi blog, alguien que no me conozca, alguien que aprecie leer y se dedique a deslizar su mirada sobre todas mis palabras, se quedará de "guao, esa chiquilla si que se enamoró".

Me siento triste, vacía, incompleta, siento que di diez pasos hacia atrás de nueve que había avanzado, sin embargo, no me arrepiento. Verle y más que todo abrazarle, removió dentro de mí todas esas sensaciones que había considerado perdidas, me sentí viva, pero así como reviví, volví a la tumba otra vez.

Nunca me había sentido tan horrible, creo que de hecho nunca había querido de esta forma -ni sufrido de la misma manera-. Siento que nunca seré capaz de superar esto, de emerger, de encontrar a alguien que sea compatible conmigo, porque a decir verdad, a estas alturas de la vida todos sabemos que queda gente poco seria en este mundo capaz de valorar el amor, la responsabilidad y el compromiso que acarrea una relación de pareja.

No entiendo cómo sigo añorando su presencia cuando salgo con mis amigos, no entiendo cómo sigo planificando mis días de manera inconsciente por si... "aparece" -porque sí, lo sigo haciendo, siempre me mentalizo como reestructuraría mi rutina en caso de que quiera verme alguna vez-. No quiero seguir sintiendo esta soledad, estas ganas de no estar con nadie, de aburrirme al hablar con cualquier persona, no quiero sentir que me estoy volviendo cada vez más cerrada, más exigente, más desconfiada, más realista...

Me había enamorado antes, pero nunca a tal magnitud, siempre que terminaba mis relaciones, tenía la esperanza de que iba a aparecer alguien que fuese compatible conmigo, que todo iría para mejor, que fue bueno terminarlo, pero lo peor es que en este caso me siento totalmente pesimista, siento que no la he superado absolutamente nada, siento que en todo momento me gustaría compartir "mi nueva vida" como me hubiese gustado hacerlo cuando lo éramos todo, lloro, es horrible, estar así en la calle y de la nada recordar cualquier cosa y que las lágrimas cedan, que la debilidad se refleje en una sola expresión, después de todo, me enamoré de verdad, lo nuestro no era ningún juego estúpido.

Han pasado meses, días, semanas, horas, lluvias, días soleados... A pesar de esto, sigo queriéndole como si nada hubiese pasado, sigo pensándole, ¿pero volver a escribirle como lo hacía recurrentemente para molestarle? No, siento que cambié, que puedo vivir sin ti -a pesar de que sea extremadamente difícil hacerlo, porque a cada momento te extraño cada vez más-...

Comentarios

Entradas populares de este blog

Las democracias son el cáncer del mundo

Sola

Herida otra vez